jueves, 28 de febrero de 2019

MARIO VARGAS LLOSA (1936 - )

Nace en Arequipa (Perú) en 1936. Conoce el éxito desde muy joven su obra La ciudad y los perros. En esta obra ambientada en un colegio militar, se satiriza con dureza el mundo cerrado y violento de la institución militar. A diferencia de otros narradores, Vargas Llosa renuncia a elementos mágicos y maravillosos y se mantiene en el plano de la realidad común. En sus siguientes novelas destaca por la facilidad con que usa las técnicas narrativas de la novela contemporánea, sus dotes de narrador y el uso del realismo crítico. De entre sus obras podemos destacar:
  • La casa verde.
  • Los cachorros. Una novela breve sobre el mundo de los adolescentes en la sociedad acomodada de Lima (Perú).
  • Conversación en la Catedral. Una extensa novela con diferentes historias que ofrecen un retrato completo del Perú contemporáneo, asolado por la corrupción y el autoritarismo.
  • La fiesta del chivo. Novela militar.
  • El sueño del celta.



—Cuatro —dijo el Jaguar.
Los rostros se suavizaron en el resplandor vacilante que el globo de luz difundía por el recinto, a través de escasas partículas limpias de vidrio: el peligro había desaparecido para todos, salvo para Porfirio Cava. Los dados estaban quietos, marcaban tres y uno, su blancura contrastaba con el suelo sucio.
—Cuatro —repitió el Jaguar—. ¿Quién?
—Yo —murmuró Cava—. Dije cuatro.
—Apúrate —replicó el Jaguar—. Ya sabes, el segundo de la izquierda.
Cava sintió frío. Los baños estaban al fondo de las cuadras, separados de ellas por una delgada puerta de madera, y no tenían ventanas. En años anteriores, el invierno sólo llegaba al dormitorio de los cadetes, colándose por los vidrios rotos y las rendijas; pero este año era agresivo y casi ningún rincón del colegio se libraba del viento, que, en las noches, conseguía penetrar hasta en los baños, disipar la hediondez acumulada durante el día y destruir su atmósfera tibia. Pero Cava había nacido y vivido en la sierra, estaba acostumbrado al invierno: era el miedo lo que erizaba su piel.
La ciudad y los perros. MARIO VARGAS LLOSA